La ola de frío que azota al Páramo de Santurbán en Santander, no cede y hasta el agua de las tuberías amanece congelada.

Así lo señaló el campesino Marcos Capacho, el explicar que la temperatura de la madrugada del sábado 4 de enero llegó a menos 14 grados centígrados y de ahí a la fecha las temperaturas han sido similares.

Argumentó, “en mi casa tuvimos agua después de las 8 de la mañana, luego que el líquido que estaba en la red se descongelara”.

Y además los cultivos amanecieron quemados, especialmente los cítricos y de cebolla.

En el corregimiento de Berlín, pleno Páramo de Santurbán, municipio de Tona, viven unos cinco mil campesinos.